AYTHAMI SANTANA EN LA PRENSA CANARIA

Aythami recibido por sus familiares, su entrenador y sus compañeros de gimnasio

El grancanario Aythami Santana se proclamó campeón del mundo de parataekwondo en San Petersburgo, en la categoría de menos de 58 kg. Es la segunda vez que logra esta gesta, ya que el año pasado inauguró la primera edición de esta competición, en Azerbaiyán, con un oro reluciente.
Detrás de estos títulos empuja un brillante palmarés que no hace más que acumular éxitos. Con tan sólo 17 años Aythami ha sido campeón de Canarias en numerosas ocasiones, en las categorías inferiores, y también en categoría absoluta.
Con un sólo brazo completo -a Aythami le falta el izquierdo desde el codo- este joven, delgado como un junco, ha vencido a rivales de todo tipo. Sin excusas ni remilgos, Aythami ha demostrado ser un campeón en toda regla. Desde el año pasado, con la celebración del primer mundial de parataekwondo, ha podido enfrentarse a rivales en igualdad de condiciones, pero los títulos ya habían empezado a llover mucho antes. Ahora su principal ilusión se centra en que el taekwondo forme parte de unos Juegos Paraolímpicos, con lo cual su presencia en Londres 2012 está prácticamente asegurada.
Aythami viajó a Rusia acompañado de la selección española -que disputa estos días el Europeo de taekwondo- y de su padre, compañero inseparable de andadura. "Me gusta acompañarlo y estar pendiente de las competiciones", explica José Juan Santana, que es además su preparador físico. "Se pasan muchos nervios", reconoce. Sobre todo en esta ocasión, ya que la revoltosa nube de ceniza islandesa les hizo temer lo peor en el viaje de ida hacia San Petersburgo. Tuvieron que hacer noche en Múnich, donde además se perdieron muchos de los equipajes de la selección. Con suerte consiguieron llegar a la ciudad rusa el mismo día de la competición, a las dos de la madrugada. "Este año era más difícil que el anterior, porque hubo más participación y el nivel es cada vez más alto", explica Aythami, que también reconoce que iba con la idea "de ganar todos los combates posibles". En este caso fueron tres los combates en los que se impuso para colgarse el oro.
Ayer en el aeropuerto le esperaban compañeros del instituto, del gimnasio Kumgang, donde entrena, su maestro, José Bordón, y su madre, Josefa Santana, pletórica de orgullo. "Estamos muy contentos", confirma, aunque los ojos a veces hablan solos. Derrotado por el cansancio, Aythami Santana no da tregua. "Mañana empiezo a entrenar", asegura. Caprichos de un campeón.

Fuente: La Provincia.es